Amo a aquellos que se parten
las espaldas trabajando
y aún así llegan a casa
y siguen siempre soñando.
Amo a los que reivindican
aunque apuren a callarlos,
a la fuerza de sus verbos
mejorarían sus trabajos.
Amo a los manifestantes,
los de hoy y los de antes
que sueñan con libertades,
dignidades absolutas.
Amo a los que dan su arte
por las calles recibiendo
las monedas de quien pasa
y se para solo un momento.
A los niños colgaditos en sus barrigas.
A las madres que por ellos darían por ellos toda la vida.
A los que guardan adentro el alma dulce de un payaso.
A los que abren, sin dudarlo, a cualquier raza sus brazos.
Amo a la libertad sexual,
a la izquierda y al "sin ira".
A los que escriben pancartas
contra guerras tan absucardas.
A los que tiran claveles.
A los que luchan y educan.
A los que persiguen sus sueños
sin cansarse aunque sea duro.
A los que creman banderas
por un mundo sin fronteras.
Amo a pipi calzas largas
por ser tan irreverente
a la pluma y al papel
del que cuenta y da emociones.
Al sonido de las voces
que jamás dicen mentidas.
A los que quieren ser niños
durante toda su vida.
Amo al ecologista,
amo también al altruista.
Amo al máximo respecto.
Amo a los que aman la vida.
A quien da su corazón,
a quien no le duele el orgullo.
A quien cuida a su alrededor...
Y a quien quiere cambiar el mundo.
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